domingo, 17 de octubre de 2021

La Cydalima perspectalis ¿se añadirá en el Catálogo Español de Especies Exóticas invasoras?

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La Cydalima perspectalis ¿se añadirá en el Catálogo Español de Especies Exóticas invasoras?



En 9 meses sabremos si la polilla del boj, Cydalima perspectalis, se incluye en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.

Seguro que estás leyendo esto y te asombra, pues creo que todos dábamos por sentado que estaría convenientemente incluida en todos los catálogos pertinentes sobre especies invasoras. Más de 1000 artículos científicos sobre esta especie comienzan del mismo modo, algo así como:

“La Cydalima perspectalis es una especie exótica invasora causante de daños en los bojes”

También tenemos demandas de políticos que sistemáticamente piden o anuncian un plan de contención contra la especie invasora Cydalima perspectalis, por lo que, aunque no detallen en qué consisten esas demandas o planes damos por hecho que ya se han puesto en marcha los engranajes legislativos pertinentes para –entre otras cosas- prohibir el comercio de materiales susceptible de transportar huevos o ejemplares jóvenes de estas especies.

Pero esto es sólo una ilusión, pues a efectos prácticos la especie no está incluida legalmente como invasora, ni en Europa (donde como ya vimos, se pidió y ejecutó un análisis de riesgos que arrojó conclusiones que rozan lo catastrófico) ni en España. Tampoco figura como especie invasora (legalmente hablando) en muchas comunidades autonómicas, entre ellas Navarra. Si la incluyen los catálogos de Catalunya, Valencia, Aragón y Baleares.


Pensando en una posible estrategia para el futuro, pongamos que conseguimos personal, financiación y equipo técnico para revisar uno a uno los bojes del Pirineo. Aplicamos BT de manera focalizada, colocamos trampas, fomentamos el incremento de depredadores y parasitoides, podamos y eliminamos ramas infectadas por el C.Buxícola, abonamos estratégicamente bojedales para que tengan más defensas y capacidad de re-brotar… Y así conseguimos minimizar hasta erradicar la presencia de Cydalima perspectalis de nuestros bosques.

Bueno, pues a fecha de hoy y tal y como está la ley, esta solución no valdría de nada, pues el día siguiente a dar por erradicada la plaga en el medio natural, una persona ignorante compra con toda su buena voluntad un boj en un vivero autorizado o en internet y ni el vivero ni el vendedor por internet ha revisado hoja por hoja el arbusto para identificar si hay puestas de Cydalima.. y la suerte hace que haya adquirido uno de esos 2 de cada 3 bojes que se comercian que tienen presencias de Cydalima perspectalis. Y así la plaga vuelve al medio natural que tanto esfuerzo nos ha costado proteger.

Según parece, para su inclusión como especie Invasora en la Comunidad Económica Europea ha de proponerlo un estado miembro. No pasa lo mismo en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, en el que cualquier ciudadano puede enviar una solicitud argumentada bajo los criterios que se encuentran en un formulario.

Es lógico pensar que con la cantidad de personas que velan a diario por el medio ambiente y la situación sanitaria de nuestros bosques alguien habría enviado la propuesta. La Vespa velutina (avispa asiática) se citó por primera vez en el año 2013 y ese mismo año se incluyó en el catálogo, la Cydalima perspectalis también se citó por primera vez ese año y ¿nadie mandó el formulario?. En 2014, 2015, 2016, 2017, 2018 la polilla del boj invadió sistemáticamente todas las Comunidades Autónomas que tienen boj natural y ornamental, causando estragos en el ecosistema de un lado a otro de los Pirineos… y la especie siguió sin regularse por ley como invasora.

A toro pasado, si se hubiesen hecho las cosas bien, en 2008 o 2009 se hubiese incluido como especie invasora en la UE y en 2013, tras la primera cita en Galicia, se hubiesen aplicado medidas para su control y erradicación. Entre otras medidas, se hubiese prohibido el comercio de bojes ornamentales, con lo que la C.Perspectalis no habría llegado ni a la Garrotxa ni a Navarra en 2014.

Pero no fue así. En 2021, 13 años después de la publicación de estudios sobre los efectos de la Cydalima en Alemania y 8 años después de los primeros informes sobre la especie invasora en España, sigue sin estar debidamente regulada por ley. Hoy es legal que críes Cydalimas y las sueltes en el bosque y hoy es legal vender arbustos con huevos, larvas y orugas para que cualquiera los ponga en su jardín.

Aquí debería salir la polilla del boj. Captura de pantalla del catálogo de especies invasoras a octubre de 2021. 


El mes pasado enviamos el formulario para incluirla en el Catálogo Nacional de Especies Invasoras y en los próximos 9 meses sabremos si se incluye o no. Lo bueno es que se ha puesto en marcha un análisis de riesgos de la especie y un comité científico valorará si la polilla del boj es invasora o no lo es. Creo que a todas vistas este comité tendrá el trabajo fácil, con la cantidad de información existente y el número de organismos que están trabajando para minimizar los efectos de la especie en el medio natural.

He sacado dos conclusiones de todo esto.

1.- No hay que dar por sentado nada, cuanto más evidente y repetitivo parezca, más es necesario contrastar datos. Aunque personas que trabajan en políticas medioambientales tilden repetidamente de invasora a una especie, es probable que estas mismas personas no hayan movido un dedo para que dicha especie se regule como debería en términos legales.

2.- Si buscamos culpables de todo esto, podríamos culpar a los burócratas que no aplicaron una ley para regular la exportación de bojes infectados en países en donde la especie se había descontrolado a finales de los 90. Podríamos culpar a los burócratas que no aplicaron una ley para regular el comercio de bojes infectados en la Unión Europea a comienzos de los 2000. Podríamos culpar a los burócratas que no aplicaron una ley para regular la introducción de esta especie invasora en España. Y de ahí podemos culpar a los burócratas autonómicos. También a todas las personas que conocedoras del problema no mandaron el formulario antes (supongo que les pasaría lo mismo que a mí, que hasta el último momento pensaba que alguien ya lo habría hecho, pero por si acaso lo envié).  

Como se suele decir, veremos lo que pasa y más vale tarde que nunca.

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